El periodista Nicolás Lovaisa aseguró en diálogo con El Hormiguero que por más que se pretenda minimizar la situación que viven los jugadores de Colón, el clima "está muy caldeado". Los futbolistas "están muy calientes" con los dirigentes y con la policía, porque "cuando hablan off the record te dicen que sienten que los entregaron".   "La policía y los dirigentes trataron de minimizar lo que ocurrió en el Hotel de Campo. Pero lo concreto es que fueron hasta allí un grupo de barras y los jugadores la pasaron muy mal. A Vegetti le tiraron con un matafuegos y a Diego Lagos lo persiguieron en moto varios kilómetros por la autopista. Un jugador tenía que ir a una cena y no pudo llegar. Hubo una denuncia judicial por parte del presidente de Colón, pero en la justicia se encuentran con el problema de que lo que existe es una denuncia general de Arioti, el presidente del club, pero ninguna denuncia concreta de parte de los jugadores. No hay colaboración al respecto y pareciera que nadie quiere que estos hechos se aclaren judicialmente".   "Hay mucha calentura entre los jugadores con los dirigentes y con la policía. Porque muchos sienten que los entregaron. Eso es lo que dicen los jugadores cuando se refieren a lo que ocurrió el miércoles previo al clásico, los directivos los mandaron a entrenar al SAT y no sólo que ningún dirigente se hizo presente, sino que tampoco había policías. Y luego del partido en el Hotel de Campo, la policía les garantizó que podían retirarse sin problemas y cuando salieron se encontraron con un grupo de 30 barras que los estaban esperando".